pesar que las masacres acabaron el año 2000, las cifras de las víctimas revelan la verdadera política del gobierno. He aquí algunos datos.
• El año 2003 la Comisión de la Verdad y Reconciliación registró 23, 969 muertos y desaparecidos, y estimó que, dadas las reticencias a declarar y las condiciones en que se efectuó el censo, la cifra probable debía ser 69,280.
• El año 2006 el Censo por la Paz, cuyo responsable es el Ministerio de la Mujer y Desarrollo Social, publica los resultados “preliminares” de dos censos. Uno que contiene los resultados del censo realizado durante los años 2001- 2003, y otro realizado el 2006. Si sumamos ambos nos da 34,653 muertos y desaparecidos. El gobierno no ha terminado los censos, oficialmente dice que está en “preparación”
• Aún así, el Censo por la Paz registra además un total de 129,910 personas entre torturadas, discapacitadas, huérfanas y viudas.
• A esa cifra debíamos añadir a los forzados a desplazarse, 430,584, y también a los que se quedaron sin identidad (documentación), 101,237
• Todo eso hace un total de 708,198 personas que debieran ser recompensadas
¿Sabe cuántas personas tiene el Registro Único de Víctimas y familiares con derecho a una posible recompensa para paliar su sufrimiento?
A la fecha están registrados solo 65,536. Si, solo un 9% del total, ¿dónde quedaron los otros?
Aún si eliminásemos a los desplazados e indocumentados, el RUV cubre a la fecha solo el 37% de las victimas, después de 10 años de que terminó el conflicto. ¿Y los familiares?
Analizar lleva a otras conclusiones que veremos en otros artículos. Por ahora vean el cuadro comparativo de abajo para que se den cuenta de la indiferencia dolosa del gobierno hacia las víctimas, mientras se llena la boca con el museo o lugar, o como se llame, de la Memoria.
lunes, 30 de agosto de 2010
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