DIARIO LA JORNADA,
AYACUCHO (12 de diciembre de 2012)
Por: Nolberto
Lamilla
Una mañana fría,
del 13 de diciembre 1984, en la localidad de Putis – San José de Secce, se
perpetro la matanza más grande registrada durante la violencia política, 123 personas
fueron asesinadas de manera cruel, la mayoría de ellos niños y niñas, otra
cantidad considerable mujeres, así como, ancianos y varones.
Días antes, del
inefable holocausto, las familias de Rudio, Marccaccay, Vizcatanpata, Orccohuasi,
Wuisccanayocc ySayhua, decidieron bajar a
Putis,donde días antes se había instalado la Base Militar del Ejercito Peruano,
portando banderas blancas en signo de paz, trayendo consigo sus escasos enseres
y animales, solicitando ayuda, protección y permiso para habitar las casas de
la localidad.
Se sabe por testimonio
de los sobrevivientes, que antes del luctuoso acontecimiento, los campesinos
vivían una situación de desesperanza, en los cerros y cuevas, huyendo
permanentemente del acoso de los subversivos, con poca alimentación, agua, abrigo
y expuesto a las inclemencias del tiempo, que ya había mellado la salud de los niños.
Al tercer día, de permanencia
de los campesinos en Putis, los efectivosmilitares y Jefes de la Base Militar, se
presentaron a las cinco de la mañana, hicieron levantar a todos los pobladores y les
reunieron en el patio de la escuela, para proponerles construir un piscigranja
y aliviar de este modo, la falta de alimentos, separando a las mujeres y niños,
dispusieron que los varones inicien la excavación del pozo.
A las diez de la
mañana, cuando ya habían logrado cavar un metro de profundidad, los militares
rodearon a los campesinos y procedieron a dispararles a quema ropa, mientras
tanto, otro grupo de soldados violaba a las mujeres, para luego proceder
asesinarlos,concluido el exterminio de grandes y pequeños, juntaron los
cadáveres en el pozo y cubrieron con piedras y tierra. Al día siguiente, los
soldados incineraron y enterraron, las prendas de vestir y enseres, para no
dejar evidencias delmasacre.
Después de 28 años,
recién el Ministerio Público, pudo formalizar denuncia penal contra los
presuntos responsables, entre ellos se
cuenta al General EP - Jefe del Comando PolíticoMilitar de Ayacucho, Wilfredo
Mori Orzo; Jefe Administrativo de la 2da división de Infantería, Juan Abraham
Briones Dávila; Jefe G-2 de Inteligencia,
de la 2da. División de Infantería del Ejército Peruano, Carlos Celso Soto
Mesinas; Jefe de la compañía "Los Linces", de Ia 2da división de
Infantería del Ejército Peruano, Luis Oscar Grados Bailetti.
A los gobiernos de
turno y la sociedad peruana, le costó mucho aceptar la existencia de este
genocidio contra una población inerme, fue necesario entonces, lapublicidad mediática
internacional, que se desato a raíz de las exhumaciones de los restos, que
reveló el horror y provocó la indignación mundial. Sólo así, admitimos que algo
nefasto había ocurrido en nuestra patria, por lo tanto, algo teníamos que hacer
para reconocer y reivindicar a las víctimas.
Parte de ese gesto,
es el reconocimiento y ceremonia post morten, que se realizará en el pleno del
Congreso de la República, el día de hoy,
a favor de las víctimas y familiares de la matanza de Putis. Esperemos, que la
justicia no tarde y las reparaciones sean suficientes, para aliviar el dolor y
las heridas aún abiertas, entre las viudas, huérfanos y sobrevivientes de la
comunidad. Ojala que hechos dolorosos, como los ocurridos durante la guerra
interna, nos deje cicatrices indelebles en nuestra conciencia colectiva, para que
no se repita nunca mas.