PARA HUMALA REPARAR A LAS VÍCTIMAS NO ES UN PRIORIDAD NACIONAL

Tras los daños causados por “el conflicto armado” que dejó 70 mil muertos, casi 20 mil desparecidos, miles de violaciones, torturas y 250 mil de personas forzadas a dejar sus hogares, el año 2004 se creó la Comisión Multisectorial de Alto Nivel (CMAN) con el fin de A) conseguir la paz. B) otorgar reparaciones, y C) conseguir la reconciliación nacional. Dada su importancia la CMAN fue adscrita a la Presidencia del Consejo de Ministros.
La CMAN es responsable del Plan Integral de Reparaciones (PIR) y del Registro Único de Víctimas (RUV). El PIR, como todo el mundo sabe, ha otorgado hasta hora unas pocas obras a las que toda población tiene derecho: unas cuantas escuelas, la construcción de pocos kilómetros de carreteras o unas postas sanitarias; obras que sirvieron a las autoridades políticas para tomarse fotografías. Las verdaderas reparaciones o sea las reparaciones individuales brillaron por su ausencia. Respecto al Registro Único de Víctimas la mezquindad de los presupuestos aprobados fue tal que su directora, Sofía Macher, tuvo que reclamar a Alan García varias veces fondos para poder cumplir su cometido. Al final Sofía se largó del Perú.


Con la llegada de Humala se creyó que acabaría la desidia y falta de solidaridad con las víctimas. Su primera decisión fue positiva: nombró como Secretaria Ejecutiva de la CMAN a Isabel Coral, conocida luchadora por los DD HH que estaba familiarizada con la situación. Desgraciadamente, el gobierno de Humala tomó después varias decisiones que ponen en cuestión su honestidad y compromiso con las víctimas. He aquí unos cuantos hechos.
1. El presupuesto solicitado por la CMAN para reparar a las víctimas el año 2012 fue de 222 millones, pero originalmente le aprobaron solo 42 millones que finalmente, luego de muchas protestas y avatares fue aumentado aunque quedó en solo 64% de lo solicitado.
2. Humala ha ordenado la suspensión del Registro Unico de Víctimas a partir de 1 de enero del 2012 sabiendo que este proceso no ha terminado. Los mismos responsables del RUV han advertido este desatino. Para mayor confusión está circulando un comunicado que dice que los que se registren después del 2 de enero de 2012 no recibirán reparaciones. ¿Entonces para qué se van a registrar?
3. La Secretaria Ejecutiva del CMAN, Isabel Coral, fue obligada a renunciar.
4. La oficina del Consejo de Reparaciones ha cerrado sus oficinas en Ayacucho.
5. La CMAN misma ya no reportará a la Presidencia del Consejo de Ministros, sino que será una dependencia más del Ministerio de Justicia. O sea que perderá categoría e influencia. Dice el gobierno que esto se hace para aligerar el trabajo del Primer Ministro ya que tiene muchos asuntos importantes. Parece que conceder licencias mineras y reprimir las protestas es su principal preocupación.

Está claro que la reconciliación nacional no es una prioridad para Humala, no tiene tiempo, hay cosas más importantes: mantener contento a El Comercio, a PPK, a los fujimoristas, a Vargas Llosa, y sobretodo a los militares. Todo eso es más importante para él que:
• Reparar a las víctimas.
• Exhumar e identificar los cadáveres que están en 7,000 fosas hasta ahora precisamente señaladas.
• Acelerar juicios de militares imputados.
• Enjuiciar a los responsables de la esterilización forzada de 300,000 mujeres.
Igual que anteriores presidentes, Humala no entiende que la reconciliación nacional es el cimiento del Perú. Sin ella a lo más que podemos aspirar es a construir un castillo de naipes.
Herbert Morote